“Yom Tov Sheni Shel Galuyot: FIESTAS Y LEYES RABINICAS”
“Yom Tov Sheni Shel Galuyot: FIESTAS Y LEYES RABINICAS”
Pesaj como se describe en la Torá es una fiesta de
siete días. En Israel se celebra como siete
días. Allí, el primer día es un día festivo y el día séptimo es día de
fiesta. Se usa el término de Yom
Tov para distinguirlo como día que no se puede trabajar y de observar la
fiesta. En Israel sólo se observa un solo Seder en la primera noche.
Pero aquí en el exilio (galut), celebramos la fiesta
durante ocho días. Los dos primeros días son de fiesta Yom Tov y los dos últimos días
también. Como los dos primeros días son Yom Tov no podemos trabajar y
tenemos dos sedarim (plural de seder). Pues en el galut celebramos dos días más
como Yom Tov que se hace en la tierra de Israel. Uno más al principio que allí
es el primer día de los días intermediarios y uno al final de la fiesta llamado
el octavo día que allí no existe es un día regular. ¿Por qué es esto así? Los otros dos días del exilio fueron
instituidos por nuestros rabinos como una ley para las
comunidades del exilio. Pero ¿Por qué? Para entender esto, primero debemos entender el proceso
de creación y el mantenimiento del calendario judío. La
Torá crea este calendario para nosotros como parte de los preparativos para la
salida de Egipto. Nos dice que el mes de ‘Aviv’ (significa primavera) debe ser considerado para
nosotros el primer mes del año. Los meses judíos son regulados por
Rosh Hodesh a principios de mes con una luna nueva que
visualmente aparece en el cielo con solamente una parte muy pequeña a la
vista. Entonces la luna va creciendo o
llenándose durante 14 días hasta que esté completamente llena (un
círculo perfecto) y disminuye hasta el día 28 ó 29 cuando el ciclo
comienza de nuevo.
Debido al hecho de que la Torá llama el mes de
Nisán el mes de la primavera nos enteramos que el
calendario lunar judío debe ser ajustado al calendario solar también. Como
el año solar tiene 365 días y el año lunar tiene 354 días hay que ajustarlo
para asegurar que la Pascua permanezca siempre como una celebración
de la primavera. De lo contrario la pascua (Pesaj) podría cambiar de temporada
de año en año como ocurre con el mes de Ramadán del calendario Islámico que
sigue solamente el ciclo lunar. Para ajustarlo y evitar este fallo del
almanaque Islámico, le añadimos un mes adicional al almanaque (mes
#13) cada tres años para impulsar la fecha de vuelta a la primavera.
Pero ese no es el único ajuste que se hace al
calendario. La Torá establece un sistema de regulación
continua y la observación de las fases de la luna seguida de una declaración de
la luna nueva por el Sanedrín. A principios de cada mes un testigo al ver la luna
nueva le daba testimonio a la corte. A continuación, el tribunal anunciaba el nuevo
mes y los días de fiesta se calculaban a partir de este anuncio. Este
fue un proceso bastante simple en la tierra de Israel, donde la palabra puede
ser transmitida por una serie de incendios o antorchas en las cimas de las montañas para
anunciarlo por grandes distancias. Pero para los judíos en el exilio era muy
difícil recibir la noticia de la declaración del Sanedrín del nuevo mes a
tiempo para celebrar las fiestas juntas con todo Israel. Por esta razón
los rabinos le añadieron un segundo día para garantizar que la fiesta
se celebre el día correcto en el exilio. Calculaban las fases de la
luna y de esa manera aunque el Sanedrín lo anuncia un día más o un día
menos lo observaban el día correcto.
Pero,
¿Con qué derecho los rabinos pueden añadirle un día a la
Fiesta? ¿Cuáles son los límites de la autoridad
rabínica? Este tema es mucho
más complicado para poder responderlo por completo en este breve ensayo,
pero podemos explicar los principios generales de la autoridad rabínica.
La ley
rabínica se destina a apoyar no a substituir la ley de la Torá. Esto significa
que los rabinos están autorizados a crear leyes que prohíben si es necesario, cosas que fueron permitidos por la
Torá (por ejemplo la poligamia) o para crear nuevos rituales que no violan las
leyes de la Torá, siempre y cuando los llamen “rabínicos” y no
“bíblicos”, por ejemplo, la creación de un día de fiesta como el Purim y
Januca. La creación del segundo día de Yom Tov cae dentro de esta
categoría. Decir que es una ley bíblica sería
una violación de la Torá porque ella prohíbe añadirle o quitarle leyes. Por esa
razón los rabinos no pueden permitir lo que está prohibido en la Torá.
Al
añadirle un día a la fiesta de la Torá su intención era protegerla y
asegurar su observancia por las comunidades de exiliados para que
ellos no falten de observar la fiesta como la Torá lo manda en el día declarado
por el Sanedrín.
Pero
ahora que tenemos un calendario establecido, sin declaraciones de la corte
suprema, ¿Por qué continuar con la práctica? Lo hacemos por
varias razones. En primer lugar, el respeto del segundo día de Yom Tov fue
instituido por los antiguos tribunales rabínicos que
tenían mucha más autoridad de nuestros tribunales en la actualidad. Nuestros
tribunales no tienen la autoridad para revocar sus decisiones. Ellos tenían ordenación en la cadena de ordenaciones
directamente de Moisés. Nosotros los Rabinos modernos no tenemos este nivel de
ordenación porque los romanos destruyeron a todos los que tenían esta
ordenación.
Otra
razón es que el segundo día de Yom Tov nos recuerda que nuestra vida en el
exilio no es la manera normal de vida de los judíos. Los Cabalistas
explican, que necesitamos dos días de Yom Tov aquí para recibir espiritualmente
lo que podríamos recibir en un solo día en Israel.
De cualquier manera nuestra capacidad
rabínica de interactuar con el calendario es el reflejo de una lección más
profunda que permite a los seres humanos a marcar el paso del
tiempo, cambiarlo y ajustarlo de acuerdo a nuestras
necesidades. La Braja al final del Kidush en festivales
expresa esto en forma explícita. Baruj atá ... .. mekadesh Yisrael vehazemanim. Bendito seas Tú.... Que santifica a Israel y las
estaciones (del tiempo). A través de nosotros y nuestros ajustes del calendario
y sus fiestas, las temporadas son bendecidas porque forman parte
de lo que usamos para conectarnos a Dios y sus mitzvot.
Moadim Lesimja y Jag Sameaj –De parte de Rabí Rigoberto Emmanuel Viñas y
Familia